Brasil iniciará la relajación monetaria con una pequeña baja de tasas
28.07.2023 17:59
© Reuters. FOTO DE ARCHIVO: Personas caminan frente al edificio de la sede del Banco Central en Brasilia, Brasil. 22 de marzo de 2022. REUTERS/Adriano Machado
Por Luana Maria Benedito y Marcela Ayres
SAO PAULO, Brasil, 28 jul (Reuters) – El Banco Central de Brasil se prepara para recortar la tasa de interés por primera vez en tres años el miércoles, y la mayoría de los economistas anticipa una pequeña reducción a pesar de los llamados del Gobierno para una acción más agresiva ante una inflación se enfría y una actividad económica que pierde fuerza.
Tras elevar el tasa de referencia en 1.175 puntos básicos para combatir la inflación provocada por la pandemia y las subidas de los precios de la energía y los alimentos, los responsables de política monetaria la han mantenido en el 13,75% desde septiembre de 2022, lo que ha provocado críticas del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Ahora, se espera que el comité de fijación de tasas del banco las baje 25 puntos básicos cuando concluya su próxima reunión el 2 de agosto, según 36 de los 46 economistas encuestados por Reuters esta semana.
Los otros 10 encuestados pronosticaron un recorte de 50 puntos básicos.
«Creemos que el paso inicial será más cauto, dada la persistencia de la desviación de la inflación a largo plazo de los objetivos oficiales, la elevada inflación subyacente y el todavía robusto mercado laboral», dijo Leonardo Costa, economista de ASA Investments.
Las opiniones de los economistas contrastan con las expectativas incorporadas en la curva de tasas de interés de Brasil, que implican una probabilidad de alrededor del 60% para un recorte de 50 puntos básicos y una del 40% para uno menor.
La publicación de datos de inflación favorables ha afianzado aún más las opiniones divergentes sobre la magnitud del próximo recorte de tasas, con el ministro de Hacienda, Fernando Haddad, abogando por una reducción más sustancial.
Las expectativas de inflación a largo plazo, que han sido una preocupación explícita para el banco central, han caído desde que el Gobierno decidió mantener su objetivo de inflación anual en el 3% para los próximos años.
La inflación al consumo en los 12 meses a mediados de julio se ralentizó a un 3,19%, menos que las previsiones del mercado y que el objetivo oficial del banco central del 3,25% para este año, aunque se espera un repunte debido a unos efectos de base menos favorables.
(Reporte de Luana Maria Benedito en Sao Paulo y Marcela Ayres en Brasilia; reporte adicional de Mumal Rathore en Bengaluru; Editado en español por Javier López de Lérida)