El consumo de los hogares más ricos sigue por debajo de los registros previos a pandemia Por EFE
17.09.2024 18:10
Madrid, 17 sep (.).- El Banco de España ha señalado que el consumo de los hogares con rentas más altas se mantiene cuatro puntos porcentuales por debajo de los registros previos a la pandemia, mientras que en el caso de los mayores de 65 años ya se ha recuperado y se encuentra dos puntos por encima.
El director general de Economía y Estadística de la institución, Ángel Gavilán, ha reconocido este martes que «la debilidad» del consumo de los hogares en general les ha sorprendido «en negativo», ya que preveían que «iba a mejorar» teniendo en cuenta el «relativo vigor» del empleo y de la renta disponible.
Este indicador y su evolución es especialmente importante debido a que es el principal componente del PIB desde el punto de vista de la demanda interna.
Así, el consumo medio por hogar se mantiene por debajo de los registros previos a la pandemia en la mayoría de grupos de población. En función de la edad, solo en hogares con el cabeza de familia mayor de 65 años se sitúa por encima, casi dos puntos porcentuales.
El resto de hogares se mantiene por debajo: dos puntos los menores de 35 y aquellos entre 55 y 64 años; seis puntos porcentuales los hogares con sustentador principal de edad comprendida entre 45 y 55; y casi siete los de 35 a 44 años.
La evolución del consumo ha sido menos favorable en los hogares más ricos, ya que se mantienen cuatro puntos porcentuales por debajo de los niveles de 2019, y han dejado de consumir, sobre todo, automóviles y otros duraderos y semiduraderos, además de ocio y cultura.
Frente a ello, los hogares de rentas más bajas se encuentran en un nivel de consumo prácticamente igual que en 2019, algo que puede deberse a que tienen menos margen para ahorrar y a que en la composición del gasto de la compra «pesa mas el gasto esencial», es decir, los productos de primera necesidad y no ajustable.
La debilidad que presenta el consumo medio por hogar también se explica, según el Banco de España, por la peor evolución del consumo en la población de origen extranjero, ya que ha incrementado su peso, con una brecha de unos cuatro puntos porcentuales respecto a la población española.
El informe del Banco de España presentado este martes indica que los factores que podrían estar detrás de estas sorpresas «a la baja» son aún muy inciertos, pero incluirían, entre otros, el «mayor impacto adverso del endurecimiento acumulado de la política monetaria» y «los acusados cambios que se están produciendo recientemente en la composición de los hogares españoles».
En todo caso, la entidad prevé que el consumo de las familias podría prolongar su senda de recuperación gradual en el tercer trimestre del año, algo a lo que apuntan el tono positivo de la confianza de los consumidores, el dinamismo del crédito al consumo, el repunte del índice de comercio al por menor de julio y de las matriculaciones de automóviles.
No obstante, este comportamiento positivo se vería parcialmente compensado por el descenso en las pernoctaciones en establecimientos hoteleros de los residentes en España durante el mes de julio.
Por ello, de cara al futuro, Gavilán ha insistido en que el consumo «se tiene que recuperar» teniendo en cuenta la evolución favorable del empleo, los salarios y la inflación, además del ahorro, pero ha reconocido que las señales «son mixtas» y «apuntan a una estabilidad en torno a los niveles actuales».