El Gobierno luso no ve «prioritario» eliminar el IVA de alimentos básicos
14.03.2023 22:52
El Gobierno luso no ve «prioritario» eliminar el IVA de alimentos básicos
Lisboa, 14 mar (.).- El ministro de Finanzas de Portugal, Fernando Medina, aseguró este martes que no es «prioritario» para el Gobierno eliminar el IVA de productos alimentarios esenciales y que priorizarán «reforzar los ingresos de las familias más vulnerables» ante el avance de la inflación.
«No lo consideramos como una medida prioritaria por las consecuencias que ya fueron visibles en los países que lo aplicaron», afirmó el ministro tras una reunión de Finanzas de la Unión Europea en Bruselas, según divulgó la agencia Lusa.
Pese a la rebaja o eliminación del IVA en algunos alimentos básicos por el Gobierno de Pedro Sánchez, España ha registrado en febrero una subida histórica de los alimentos del 16,6 % interanual frente a un 6 % de subida del IPC.
A criterio de Medina, hay que «reforzar los ingresos de las familias más vulnerables y concentrar ahí los esfuerzos», en un momento en el que los alimentos básicos en Portugal están casi un 30 % más caros que en enero de 2022.
«Son las familias las que deciden, en última instancia, lo que es mejor y qué elecciones pueden hacer mejor», añadió, y defendió medidas como la subida del salario mínimo en Portugal, que se espera que en 2023 pase de 705 a 760 euros.
“Las recomendaciones europeas también incluyen una revisión de los mecanismos de apoyo a la reducción de precios que han puesto en marcha los distintos países, en varios ámbitos, haciéndolos más selectivos en relación con el público más frágil y vulnerable, y eso es lo que también haremos», matizó.
El Gobierno del socialista António Costa anunció la semana pasada un operativo de la Autoridad de Seguridad Alimentaria y Económica (ASAE) por todo el país para fiscalizar los precios de los alimentos en los supermercados.
La cesta de productos básicos aumentó un 29 % entre enero de 2022 y febrero de 2023, con incrementos en los márgenes de comercialización de hasta el 50 %, según el Ejecutivo, casi cuatro veces por encima de la inflación registrada en 2022.
Esta decisión ha sido criticada por los supermercados lusos, que aseguraron que no «engañan» a los consumidores y que no han aumentado sus márgenes de comercialización.