El Kremlin dice que la explosión de un conducto de amoníaco es negativa para el acuerdo de granos

MOSCÚ, 8 jun (Reuters) – El Kremlin declaró el jueves que una explosión que dañó un conducto que transportaba fertilizante amoniacal desde Rusia a través de Ucrania y que Moscú quiere que se vuelva a poner en marcha tendría un impacto negativo en el acuerdo sobre cereales del mar Negro.

La red de suministro Togliatti-Odesa, que antes bombeaba hasta 2,5 millones de toneladas anuales de amoníaco para su exportación mundial al puerto ucraniano de Pivdennyi, en el mar Negro, desde Togliatti, en el oeste de Rusia, lleva parada desde el comienzo de la guerra.

Rusia ha acusado a las fuerzas ucranianas de volar una parte del conducto, el más largo del mundo que transporta amoníaco, en la región ucraniana de Járkov el lunes por la noche. El gobernador regional ucraniano afirmó que fue Rusia quien bombardeó la tubería el martes por la noche. Ninguna de las partes aportó pruebas que respaldaran sus acusaciones.

Preguntado por los periodistas sobre el impacto que tendrían los daños del conducto en el destino del acuerdo sobre el grano del mar Negro, que facilita las exportaciones agrícolas desde Ucrania a través de esta vía marítima, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, declaró: «Solo puede tener un impacto negativo».

«No sabemos qué tasa de destrucción hay, no sabemos qué va a hacer ahora la parte ucraniana con este ramal» del conducto, dijo Peskov.

«Saben que este tema figuraba como parte integrante de la mitad del acuerdo que nos preocupaba, por lo que se trata de una complicación más en términos de ampliación del acuerdo».

El ministro ruso de Industria y Comercio, Denis Manturov, declaró anteriormente el jueves que Moscú no tenía acceso a la parte dañada del conducto y que no esperaba que se le concediera, informó la agencia de noticias Interfax.

El acuerdo de exportación de grano ucraniano al mar Negro fue negociado por Naciones Unidas y Turquía en julio del año pasado para ayudar a aliviar una crisis alimentaria mundial agravada por el conflicto que interrumpe las exportaciones de dos de los principales proveedores de grano del mundo.

Para ayudar a persuadir a Rusia de que permitiera a Ucrania reanudar sus exportaciones de grano al mar Negro el año pasado, en julio también se alcanzó otro acuerdo de tres años por el que Naciones Unidas acordó ayudar a Rusia con sus exportaciones de alimentos y fertilizantes.

Rusia afirma que ambos acuerdos son partes interconectadas de un mismo «paquete», por lo que la no reanudación de las exportaciones de fertilizantes supone un grave incumplimiento de los términos del acuerdo.

La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, María Zajárova, declaró el miércoles que se tardaría entre uno y tres meses en reparar la sección dañada del conducto.

(Reporte de reporteros de Reuters; Redacción: Guy Faulconbridge; Edición de Andrew Osborn; editado en español por Tomás Cobos)

Source link