El PE urge a Hungría a levantar su veto al tipo mínimo para multinacionales
06.07.2022 20:39
El PE urge a Hungría a levantar su veto al tipo mínimo para multinacionales
Bruselas, 6 jul (.).- El Parlamento Europeo (PE) pidió este miércoles a Hungría que retire «inmediatamente» su bloqueo a la propuesta para introducir un tipo mínimo del 15 % para multinacionales en la Unión Europea y a la Comisión y los Estados miembros que «no entren en un regateo perjudicial» con los socios que «abusan de sus vetos nacionales».
Los eurodiputados se pronunciaron así en una resolución no vinculante, aprobada con 450 votos a favor, 132 en contra y 55 abstenciones, emitida a raíz de que Budapest vetase el mes pasado el acuerdo para implementar en la UE el tipo mínimo aprobado globalmente en el seno de la OCDE, pese a que previamente había indicado que no tenía reticencias tras lograr algunas modificaciones en el texto.
La Eurocámara considera que las demandas notificadas por Hungría para levantar su bloqueo fueron ya tenidas en cuenta en el acuerdo internacional y piden al Consejo (los Estados miembros) que adopten «rápidamente» la directiva para implementar el pilar 2 del pacto de la OCDE, que fija un tipo mínimo efectivo del 15 % en el impuesto de sociedades para las multinacionales que facturen más de 750 millones de euros al año.
Insisten además en que, si Budapest no retira su veto, la UE deberían estudiarse opciones alternativas para hacerlo, incluyendo la posiblidad de utilizar el mecanismo de cooperación reforzada, que permite aplicar una medida en un grupo de países en lugar de en el conjunto de los Veintisiete si al menos nueve de ellos están de acuerdo.
Y piden a la Comisión Europea a relanzar el debate para que las decisiones en materia de fiscalidad, que ahora requieren unanimidad de los Veintisiete, se tomen por mayoría cualificada.
La Eurocámara insta asimismo a la Comisión Europea y el Consejo a no aprobar el plan de recuperación de Hungría hasta que el país haya «cumplido plenamente los criterios establecidos» para ello, «en particular las recomendaciones específicas por país en el ámbito del Estado de Derecho, la independencia del poder judicial, así como la prevención y la lucha contra el fraude, los conflictos de intereses y la corrupción».
Las diferencias en este ámbito han impedido hasta ahora que Bruselas dé luz verde al plan de recuperación de Budapest, contra quien ha iniciado además el nuevo mecanismo que vincula los fondos comunitarios al cumplimiento de derecho y que podría acabar con una suspensión de fondos al país que dirige el ultraconservador Viktor Orbán.
Su Gobierno anunció por sorpresa en el Consejo de ministros de Economía y Finanzas de junio que no podía apoyar la propuesta del tipo mínimo efectivo en la UE, que requiere unanimidad de los Veintisiete para salir adelante, justo cuando Polonia había comunicado que retiraba su veto a la misma poco después de ver aprobado su plan de recuperación.
Hungría, que había expresado reservas en los primeros meses de las negociaciones pero fueron resueltas cuando los Veintisiete ofrecieron una serie de excepciones en la aplicación del gravamen, justificó su postura en que introducir el impuesto «de forma prematura» provocaría «daños graves» en la economía en un contexto de alta inflación, elevados costes de la energía y los alimentos, y problemas de suministro derivados de la guerra en Ucrania.
Francia, que presidió el Consejo durante el primer semestre del año, afeó a Budapest que cuando dio en un primer momento su visto bueno a la medida ya había comenzado la guerra y el club también había respondido a su demanda sobre el calendario.
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