El teléfono del presidente español fue infectado por el programa espía Pegasus
02.05.2022 12:40
FOTO DE ARCHIVO: El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, habla por teléfono durante la primera cumbre presencial de la UE desde el brote de la enfermedad del coronavirus (COVID-19), en Bruselas, Bélgica, 20 de julio de 2020. REUTERS/John Th
MADRID, 2 may (Reuters) – Las autoridades españolas han detectado el programa espía «Pegasus» en los teléfonos móviles del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y de la ministra de Defensa, Margarita Robles, según informó este lunes el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños.
Bolaños dijo en una rueda de prensa que el teléfono de Sánchez fue infectado en mayo de 2021 y que entonces se produjo al menos una filtración de datos. No quiso decir quién podría haber espiado al presidente español ni si se sospecha que alguna potencia extranjera o grupo español está detrás del ciberespionaje.
«Es evidente que estamos ante intervenciones ilícitas y externas», dijo Bolaños, añadiendo que las infecciones habían sido denunciadas ante la Audiencia Nacional.
«Cuando decimos intrusiones externas, queremos decir que son ajenas a los organismos estatales y no cuentan con autorización judicial», dijo.
El anuncio se produjo tras la intensa presión ejercida sobre el Gobierno de coalición de izquierdas de España para que diera explicaciones después de que el grupo canadiense Citizen Lab dijera que más de 60 personas vinculadas al movimiento separatista catalán habían sido objeto del programa espía «Pegasus», fabricado por el grupo israelí NSO.
Tras las acusaciones de espionaje a miembros del movimiento separatista catalán, el principal aliado del Gobierno en el Congreso de los Diputados, el partido independentista catalán de izquierdas ERC, dijo que no apoyaría a Madrid hasta que tome medidas para restablecer la confianza.
El organismo de control de la protección de datos de la Unión Europea ha pedido que se prohíba el uso de Pegasus, por considerar que los Gobiernos clientes lo han utilizado para espiar a activistas por los derechos humanos, periodistas y políticos.
(Información de Graham Keeley, información adicional de Andrei Khalip y Belén Carreno; edición de Frank Jack Daniel; traducción de Darío Fernández)