Funcas eleva cuatro décimas su previsión de crecimiento para 2024, hasta el 2,5 % Por EFE
04.07.2024 13:16
Madrid, 4 jul (.).- Funcas ha elevado cuatro décimas su previsión de crecimiento del PIB para 2024, hasta el 2,5 %, debido al «mejor comportamiento» del primer trimestre, al dinamismo del consumo privado y de la inversión en infraestructuras, además de la aportación del sector exterior, sobre todo el turismo.
La demanda interna aportará 2,1 puntos, cuatro más que en 2023, y dicha aceleración se percibirá en el consumo privado -gracias a la mejora de la renta disponible y al ahorro- y en la inversión, especialmente en infraestructuras, por el impulso de los fondos europeos.
En un comunicado, Funcas explica este jueves que la construcción residencial y la inversión en equipo tendrán «un comportamiento más moderado» por los cuellos de botella en el mercado de vivienda, en el primer caso, y por los tipos de interés, en el segundo.
El consumo público será el único componente de la demanda interna que se frenará, en un contexto de prórroga presupuestaria y de reactivación de las reglas fiscales europeas.
Respecto al sector exterior, contribuirá al crecimiento con 0,4 puntos, un resultado «sólido» que se sustenta en la «buena evolución del turismo» y, en menor medida, de las exportaciones de servicios no turísticos, mientras que las importaciones «se recuperarán en consonancia con la elasticidad histórica».
Para 2025, Funcas ha revisado dos décimas a la baja su previsión, hasta el 1,8 %, debido a una recuperación de las importaciones, al agotamiento del rebote del turismo y a la progresiva disipación del ahorro acumulado, que afectará al consumo privado.
La inflación se mantiene
En cuanto a la inflación, Funcas espera que en 2024 se sitúe en el 3,3 %, debido a los ajustes de IVA e impuestos especiales, de los acuerdos de recuperación de poder adquisitivo y del débil comportamiento de la productividad, mientras que se moderará en 2025 aunque «se situará por encima del objetivo del 2% tanto en España como en el resto de la eurozona».
El deflactor del PIB, variable que mejor aproxima las tendencias subyacentes, se situará en el 3,4 % este año y en el 2,5 % el próximo.
Funcas añade que «el tirón del empleo se mantendrá, con la creación de 730.000 puestos de trabajo netos en el conjunto del bienio 2024-2025», aunque «el crecimiento del empleo irá perdiendo vigor durante el próximo ejercicio».
Así, la tasa de paro todavía se situará en el 10,3 % en términos medios en 2025, una de las más altas de Europa, mientras que el déficit y la deuda pública descenderán en porcentaje del PIB, fruto sobre todo de factores coyunturales, y a partir de 2025 el déficit público se estancaría en el entorno del 3 %.
Para conseguir un descenso de la ratio un punto por año, Funcas insiste en que «sería necesario mantener un alto ritmo de crecimiento de la economía, algo que solo es posible con una recuperación de la inversión y con reformas».
El principal riesgo para el cumplimiento de estas previsiones es geopolítico, particularmente si empeoran las crisis en Ucrania y Oriente Medio, aunque también la posibilidad de que se produzcan tensiones en los mercados financieros.
A largo plazo, Funcas muestra su preocupación por la negativa evolución del PIB per cápita, cuyo origen se encuentra en el reducido crecimiento de la productividad, e insiste en que es «especialmente inquietante» el estancamiento de la inversión empresarial.
A su juicio, si no experimenta una recuperación significativa, supondrá un empeoramiento del problema de productividad y una menor capacidad de crecimiento de la economía española a lo largo de los próximos años.