Gas natural y explosión de Freeport ¿El dolor europeo es una bendición para EE.UU?
09.06.2022 21:30
En un discurso de 1959, John F. Kennedy dijo:
«Cuando se escribe en chino, la palabra ‘crisis’ se compone de dos caracteres: uno representa el peligro y otro la oportunidad».
Aunque hoy en día se reconoce ampliamente que ésta no es la interpretación correcta de los caracteres chinos, la sabiduría del presidente Kennedy sobre que una crisis produce oportunidades únicas puede ser más importante que nunca.
Este es el caso de la explosión del miércoles en Freeport LNG, en la costa del Golfo de Texas, que cerrará una de las mayores plantas de exportación de gas natural de Estados Unidos durante al menos tres semanas.
La explosión hizo saltar literalmente por los aires una importante fuente de suministro con la que contaban los compradores europeos de GNL en medio de su boicot al gas ruso por la invasión de Ucrania. Freeport representa alrededor del 20% de todo el procesamiento de GNL de Estados Unidos y últimamente también ha estado atendiendo la creciente demanda china de gas natural licuado.
La planta puede procesar hasta 2,100 millones de pies cúbicos de gas natural al día (mpc/d), y a plena capacidad puede exportar 15 millones de toneladas al año (MTPA) del gas licuado. Las exportaciones estadounidenses de GNL alcanzaron un récord de 9,700 mpc/d el año pasado.
En marzo, se embarcaron en la instalación unos 21 cargamentos de GNL, que transportaron unos 64,000 millones de pies cúbicos (mpc) de gas a destinos en Europa, Corea del Sur y China, según el Departamento de Energía de Estados Unidos. Esta cifra es superior a los 15 cargamentos de febrero y a los 19 de enero.
Freeport LNG envía actualmente unos cuatro cargamentos a la semana y una parada de tres semanas sacará del mercado al menos un millón de toneladas de GNL.
«Se trata de una importante interrupción de la producción en una de las principales instalaciones de Estados Unidos», declaró Alex Munton, director de gas y GNL a nivel mundial de la empresa de investigación Rapidan Energy, en declaraciones recogidas por Reuters.
Y añadió: «Va a significar una cosa: escasez» en el GNL mundial.
Por otro lado, el cierre de Freeport abre una inesperada válvula de alivio en el ajustadísimo mercado nacional estadounidense de gas natural seco o regular.
La explosión de Freeport no es un cambio de juego a largo plazo
Con un menor suministro de GNL -que se destina exclusivamente a la exportación-, las empresas de servicios públicos estadounidenses tendrán más gas en sus manos durante las próximas semanas para quemarlo para la generación de energía, proporcionar refrigeración a las ciudades estadounidenses sobrecalentadas, especialmente las de Texas, y añadirlo al almacenamiento.
No se trata de un cambio de juego a largo plazo. El déficit de almacenamiento de gas en EE.UU. es de más de 300,000 mpc sobre la media de cinco años. El máximo que podría desviarse al mercado nacional con un cierre de tres semanas de Freeport sería de unos 45,000 mpc.
Sin embargo, en un mercado muy estresado que busca cualquier tipo de suministro adicional, será un alivio bienvenido, subrayando la ya legendaria caracterización de Kennedy de que una crisis para uno es una bendición para otro.
A pesar del incidente de Freeport, es probable que las empresas de servicios públicos de EE.UU. hayan añadido al almacenamiento 96,000 mpc de gas natural, menos de lo normal, durante la semana que terminó el 3 de junio, tras un calor inusual en todo Estados Unidos que presumiblemente aumentó la demanda de refrigeración, según el consenso de las estimaciones de los analistas que sigue Investing.com.
La inyección proyectada se compara con la acumulación de 98,000 mpc vista durante la misma semana hace un año y una inyección promedio de cinco años (2017-2021) de 100,000 mpc.
En la semana anterior, las empresas de servicios públicos añadieron 90,000 mpc de gas al almacenamiento.
Si es correcta, la inyección prevista por los analistas para la semana que terminó el 3 de junio elevaría las reservas a 1,998 billones de pies cúbicos (bcf), aproximadamente un 14.6% por debajo de la media de cinco años y un 16.6% por debajo de la misma semana de hace un año. La Administración de Información Energética de EE. La Administración de Información de EE.UU. comunicará la cifra oficial de reservas en su actualización semanal sobre el almacenamiento de gas que se publicará a las 10:30 ET (14:30 GMT).
Según los datos de Refinitv, asociada a Reuters, la semana pasada se produjeron unos 57 días de grados de frío (CDD), lo que superó la cifra normal de 30 años de 48 CDD para el periodo.
Los CDD, utilizados para estimar la demanda de refrigeración de hogares y empresas, miden el número de grados que la temperatura media de un día supera los 65 grados Fahrenheit.
Como todas las crisis de materias primas, la de Freeport se reflejó casi inmediatamente en los precios de mercado del gas natural, en este caso, en el Henry Hub de la Bolsa Mercantil de Nueva York.
Después de superar los máximos de 14 años, por encima de los 9 dólares, durante tres sesiones consecutivas, gracias a la inquebrantable presión sobre el almacenamiento, el repunte del gas del Henry Hub en el primer mes se detuvo en seco al conocerse la noticia de la explosión de Freeport.
En la preapertura del jueves en Nueva York, el contrato del primer mes, para entrega en julio, bajó 38 centavos, o un 4.4%, a 8.27 dólares en el comercio asiático.
En comparación con el máximo del miércoles, de 9.66 dólares, suponía un descenso de casi 1.40 dólares, o un 14.5%, en sólo 24 horas.
Aunque no supondrá una mejora estructural en el almacenamiento de gas en Estados Unidos, el incidente de Freeport podría suponer algunas adiciones interesantes de suministro a corto plazo, dijo James Bevan, vicepresidente de investigación de Criterion Research.
Añadió Bevan:
«Suponiendo que el peor escenario sea una interrupción completa de las instalaciones hasta finales de octubre, el incidente de Freeport LNG podría retrasar una media de 1.95 tcf/d a la red y añadir 285 tcf al almacenamiento. Incluso una interrupción de dos meses hasta julio de 2022 añadiría 105 tcf a los inventarios».
Bevan también señaló otros factores interesantes, como el consumo de energía de Freeport, que cuando está en pleno funcionamiento, saca 690 megavatios de la red de Texas.
Texas se está cociendo
Esto podría ser otro gran alivio para Texas, que se está horneando con temperaturas de tres dígitos ahora que podrían llevar a una demanda de electricidad récord este fin de semana, ya que los habitantes del estado encienden sus aires acondicionados al máximo para escapar del castigador calor.
Casi el 80% de Texas sigue experimentando una sequía al menos moderada, según el Monitor de Sequía de Estados Unidos. Alrededor del 18% del estado se encuentra actualmente en medio de una sequía excepcional, que es la categoría más alta posible.
El calor récord estaba impulsando la demanda de gas en todo Texas, dejando poco exceso de oferta para el almacenamiento, donde los inventarios han luchado por salir del profundo agujero tras la temporada de invierno.
«Las condiciones muy secas en la superficie dan a la atmósfera la capacidad de calentarse más rápida e intensamente de lo que lo haría normalmente», dijo AccuWeather.
El pronosticador meteorológico dijo que el calor sofocante estaba haciendo que las temperaturas se dispararan hasta 15 grados por encima de lo normal en varias ciudades de Texas. San Antonio, por ejemplo, lleva varios días consecutivos soportando un calor récord. Entre el domingo y el martes se establecieron oficialmente nuevos récords, incluyendo lecturas consecutivas de 40 grados el lunes y el martes.
«En San Antonio, más calor récord para el próximo fin de semana y principios de la semana que viene hará que esta primera mitad de junio sea una de las más calurosas que se recuerdan», dijo el meteorólogo principal de AccuWeather, Bill Deger. Los récords podrían ponerse a prueba durante varios días, añadió.
Sin embargo, a pesar de la caída del Henry Hub el jueves, los precios de la gasolina podrían repuntar rápidamente y volver a situarse en el territorio de los 9 dólares, según los analistas.
A pesar de la caída, los precios podrían repuntar rápidamente
Esto se debe a que la interrupción del suministro de GNL, independientemente de su duración, probablemente impulsará los precios mundiales, ya que habrá menos cargamentos estadounidenses disponibles en el mercado. Europa seguirá recibiendo cargamentos para reponer los inventarios de almacenamiento de cara al próximo invierno, mientras que la demanda de Asia está empezando a aumentar para el verano. Cualquier subida potencial podría repercutir en el mercado estadounidense, aunque sea temporalmente.
«La repentina caída del Henry Hub puede haber proporcionado el reequilibrio necesario para la lectura diaria del estocástico del gas natural, que se había acercado a niveles de sobrecompra», dijo Sunil Kumar Dixit, estratega técnico jefe de skcharting.com.
Si la caída fuera exagerada por algún motivo, podría tocar el promedio móvil exponencial de 50 días de 7.85 dólares y el soporte horizontal de 7.50 dólares, e incluso alcanzar el promedio móvil simple de 100 días de 6.50 dólares.
«La divergencia estocástica en los gráficos semanales y mensuales puede desencadenar el agotamiento en el rally previo a Freeport», dijo Dixit.
La subida podría reanudarse después de la consolidación entre 8.10 y 7.50 dólares o un tramo más bajo hasta entre 7.50 y 6.50 dólares, dijo, y añadió:
«Es probable que surjan nuevas compras desde las zonas de valor, para reanudar hacia los 9.65 dólares».
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