La industria teme que la reforma farmacéutica de la UE dañe innovación y competitividad
22.06.2023 08:51
© Reuters. La industria teme que la reforma farmacéutica de la UE dañe innovación y competitividad
Bruselas, 22 jun (.).- La Federación Europea de Industrias y Asociaciones Farcaméuticas (EFPIA) consideró hoy que la reciente propuesta de la Comisión Europea para revisar la legislación farmacéutica de la UE tendrá efectos contrarios a los deseados, como «dañar la innovación y socavar aún más la competitividad» de los laboratorios.
«El impacto neto de las propuestas será dañar la innovación y socavar aún más la competitividad», señaló EFPIA en un comunicado en el que comparte un primer análisis sobre la iniciativa.
La Comisión Europea presentó el pasado abril una esperada propuesta -retrasada en tres ocasiones- para reformar la legislación europea sobre farmacia por primera vez en dos décadas.
En la iniciativa, que tendrá que negociarse con los Estados miembros y el Parlamento Europeo, Bruselas plantea reducir de 11 a 9 años la exclusividad de mercado que tiene una compañía cuando desarrolla un nuevo medicamento, aunque al mismo tiempo, introduce un sistema de incentivos que permite a las farmacéuticas obtener hasta 12 años de protección, si cumplen ciertos requisitos.
EFPIA considera que esos incentivos son «complejos», de tal forma que «en la práctica» es «imposible alcanzarlos».
El grupo de presión de los laboratorios en Bruselas recordó además que las farmacéuticas contribuyen «más a la balanza comercial de la UE que cualquier otro sector», con 215.000 millones de euros de exportaciones anuales.
Y aseguró que la industria farmacéutica y la Comisión Europea comparten el mismo objetivo, que pasa por «aumentar el acceso a los medicamentos en toda Europa y el fortalecimiento de la competitividad de sector farmacéutico europeo».
Pero EFPIA cree el Ejecutivo comunitario no acierta en su enfoque, pese a que agradece que se haga «evolucionar el sistema regulatorio de Europa, que no ha sido ampliamente modernizado en los últimos veinte años y es cada vez más lento que los EE.UU. y otros regiones líderes».
«La afirmación de que las propuestas mejorarán la accesibilidad de los medicamentos y las vacunas al tiempo que impulsar la investigación científica y la innovación en Europa es engañosa», dice EFPIA.
Esa plataforma considera que «las propuestas ponen en peligro avances en la atención de todas las personas, desde las que viven con las enfermedades crónicas más comunes hasta las que lo hacen con enfermedades poco conocidas y ultra raras», y propone una serie de enmiendas.
Entre ellas, pide crear un marco regulatorio que garantice «el uso máximo de vías aceleradas en apoyo de los pacientes necesidades», y que la Comisión atienda al mandato de los países de «reforzar, en lugar de recortar, la exclusividad del mercado de medicamentos huérfanos» e impulsar «incentivos separados para impulsar la innovación y enfrentar los desafíos de la atención médica».
El sector farmacéutico reclama también que se le tenga en cuenta en la planificación sobre cómo abordar «las barreras y los retrasos en el acceso a nuevos tratamientos», y que se proporcione una definición amplia de «paciente de necesidad médica insatisfecha» que incentive «vías de investigación para satisfacer las necesidades de las personas que viven con enfermedades raras y afecciones crónicas».
Por último, las farmacéuticas pidan que la revisión legislativa garantice que los requisitos en las cadenas de suministro para aminorar el impacto ambiental de las medicinas y su producción sean «proporcionados y adecuados para su propósito».
EFPIA y sus miembros se comprometieron a trabajar durante los próximos meses con los eurodiputados, los Estados miembros y otras partes interesadas «para cerrar, en lugar de ampliar, la brecha entre la UE y los EE.UU. y Asia».
«En un momento crítico para Europa, un sector farmacéutico resiliente y globalmente competitivo es esencial para garantizar la salud a largo plazo de los europeos, así como la autonomía estratégica y una economía próspera», declaró el presidente de EFPIA y presidente ejecutivo de Novo Nordisk (CSE:), Lars Fruergaard Jørgensen.