La inflación británica baja al 10,7 % pero permanece en un nivel muy alto

Londres, 14 dic (.).- El índice de precios al consumo (IPC) del Reino Unido se situó en noviembre en el 10,7 %, frente al 11,1 % en octubre, pero se mantiene en los niveles más altos en 40 años por el incremento de los precios de los alimentos, según las últimas cifras de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS, en inglés).

Los precios de la electricidad y el gas, pero especialmente de los de los alimentos y las bebidas no alcohólicas, mantienen alta la inflación, aunque algunos expertos estiman que el IPC pudo haber superado el mes pasado su pico.

La inflación en noviembre registró un descenso mayor del esperado por los analistas, que habían avisado que bajaría al 10,9 %.

LA INFLACIÓN POR ENCIMA DEL OBJETIVO DEL 2 %

La inflación está muy por encima del 2 % que el Banco de Inglaterra se ha marcado como objetivo, lo que le llevó a la entidad a disponer de varios incrementos de los tipos de interés -actualmente en el 3 %-.

Debido al fuerte incremento del coste de vida, diversos sectores, entre ellos los trabajadores ferroviarios, correos, enfermeras o los encargados de gestionar los equipajes en aeropuertos, han convocado huelgas en demanda de mejoras laborales, lo que ha profundizado la crisis por la que atraviesa el Reino Unido.

El ministro de Economía, Jeremy Hunt, dijo hoy en una declaración que la inflación es «el enemigo número uno» del país.

Debido a los efectos de la pandemia y la guerra en Ucrania, el nivel tan alto de la inflación «está afectando a las economías en toda Europa. Mi principal prioridad es reducir la inflación para que los salarios de la gente rindan más», agregó.

Los precios de los alimentos registraron un ascenso del 16,5 %, mientras que los de la ropa y el calzado subieron el 7,1 % y el tabaco ascendió el 0,1 %.

LA INFLACIÓN PUDO PASAR EL PICO

El responsable de investigación de las Cámaras de Comercio británicas, David Bharier, indicó que la inflación puede haber «pasado el pico», pero avisó que, incluso si el índice empieza a disminuir, es significativo el daño para la confianza empresarial.

«Con márgenes muy reducidos, muy pocas pymes (pequeñas y medianas empresas) planean aumentar la inversión mientras se enfrentan a un muro de facturas de energía», agregó Bharier.

«Más de la mitad de las pymes nos dicen que tendrán dificultades para pagar sus facturas de electricidad y gas», subrayó.

En tanto, Sharon Graham, secretaria general del sindicato Unite, dijo que el Gobierno conservador de Rishi Sunak está «en curso de colisión con la gente», en clara referencia a las huelgas.

«Aunque la tasa de inflación ha bajado muy levemente, el costo de la vida todavía está cerca de un máximo de 40 años. Las últimas cifras confirman nuevamente que los trabajadores se enfrentan a un invierno sombrío», agregó Graham.

El director económico de la ONS, Grant Fitzner, dijo hoy que, si bien el IPC está aún en «niveles históricos», la inflación se ralentizó debido a una caída de los precios del carburante.

«Los precios del tabaco y la ropa también aumentaron, pero de nuevo por menos de lo que vimos el año pasado en esta época. Esto fue parcialmente compensado por los precios en restaurantes, cafeterías y pubs, que subieron este año en comparación con la caída del año pasado», agregó Fitzner.

La Oficina de Responsabilidad Presupuestaria (OBR, en inglés), que supervisa las cuentas públicas del Reino Unido, estimó recientemente que la inflación pueda bajar al 7,4 % en 2023.

Aunque el Reino Unido tendrá que esperar hasta enero para conocer los últimos datos oficiales del producto interior bruto (PIB) para saber el estado de la economía, Hunt indicó recientemente que el Reino Unido ha entrado en recesión.

Este jueves, el Comité de Política Monetaria del banco emisor inglés dará a conocer su última decisión sobre los tipos.

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