La mayoría de los libros de inversión tratan sobre la compra
09.12.2022 11:45
Comprar es el término más repetido, de manera secular, en los informes de los bancos de inversión y de las gestoras, grandes y pequeñas. Comprar es lo más fácil, porque siempre hay papel dispuesto a satisfacer tu deseo. Lo más difícil es vender, porque no siempre hay demanda y no siempre se tiene la cabeza fría para deshacer posiciones en una buena racha, ¡ay de la codicia! «La mayoría de los libros de inversión tratan sobre la compra. La mayoría de las conversaciones de inversión se refieren a la compra. Irónicamente, de los tres componentes de la inversión: comprando, esperando, vendiendo. Lo más fácil resulta ser comprar…»,dice A Simple Life@position_trader
Pero, «es imposible producir un rendimiento superior a menos que haga algo diferente a la mayoría. Si compra los mismos valores que todos los demás compran, tendrá los mismos resultados que todos los demás». (Sir John Templeton) Excelente frase, apoyada, más abajo, en un gran artículo, con sus gráficos correspondientes. Insistencia en un fenómeno, que se repite todos los años. La mayor parte de las firmas de análisis y de las gestoras repiten los mismos patrones, recomiendan los mismos valores.
Es un cortapega, que afecta tanto a los valores de máxima capitalización, como a los más pequeños. Con frecuencia, los mejores resultados se dan en aquellos valores que no aparecen en listado alguno de recomendaciones. Dos cosas a tener en cuenta en la Bolsa española. Una, el fenómeno es más concentrado en la Bolsa española, porque el número de empresas cotizadas en más cortos, respecto a las grandes Bolsas del mundo. Dos, en los valores, que no aparecen en las recomendaciones, también se producen quebrantos muy dolorosos. La Bolsa nunca fue fácil.
Jesse Felder@jessefelder
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«Después de cada batacazo y el consiguiente rebote técnico, generalmente de corta duración, se reproducen los mismos esquemas, se repiten los mismos términos: COMPREN, LA BOLSA HA TOCADO FONDO. Llevamos con esta canción toda la vida. Tengo algún amigo que ha perdido las pestañas, y algo más, en ese intento continuado, presa de la ambición, de las ansias de dar el pelotazo de su vida. Una vez más, se repite en todos los medios la misma historia…»
«El problema, no obstante, reside en la elección. En los más de cuarenta años que llevo en la Bolsa he comprobado hasta la saciedad un hecho: todos los días se puede comprar, pero no todos los días se puede vender. Luego, el problema no es comprar sino qué comprar. Conozco a muchos especuladores y operadores en Bolsa que se han quedado colgados de la brocha toda su vida y que legarán a sus descendientes un papel que no sirve para nada, acciones de empresas desaparecidas», me dice C.A. uno de los viejos lobos de mar de la Bolsa española.