La permuta de ‘deuda oculta’ regional que planea China superará los 284.000 millones euros Por EFE
14.10.2024 10:28
Shanghái (China), 14 oct (.).- El plan de permuta de la ‘deuda oculta’ de los gobiernos locales y regionales de China superará los 2,2 billones de yuanes (310.941 millones de dólares, 284.635 millones de euros), según estimaciones divulgadas hoy por la agencia oficial de noticias Xinhua.
Este fin de semana, el ministro de Finanzas, Lan Fo’an, avanzó un aumento extraordinario «a una escala relativamente grande» del techo de deuda con el objetivo de permutar esos pasivos ocultos y ayudar así a las administraciones locales a reducir sus riesgos de deuda y limpiar sus balances.
Si bien Lan se limitó a apuntar que los detalles de este plan se conocerían toda vez que se resuelvan los respectivos procedimientos legales, Xinhua subraya hoy que el ministro también aseguró que sería «el más fuerte en los últimos años», y recuerda que la cantidad del año pasado fueron esos 2,2 billones de yuanes, por lo que las nuevas medidas «definitivamente superarán» esa cifra.
Pekín lleva años preocupado por la ‘deuda oculta’ a nivel regional: en 2018, ya reclamó a los gobiernos locales que dejasen de acumularla a través de los canales informales de financiación conocidos como ‘vehículos financieros de gobiernos locales’ (LGFV, por sus siglas en inglés).
Los LGFV son entidades semipúblicas que fueron creadas para esquivar las limitaciones al endeudamiento de las autoridades regionales, y se extendieron por toda China tras la crisis financiera de 2008, acumulando una deuda total de unos 66 billones de yuanes (9,3 billones de dólares, 8,5 billones de euros), según estimaciones del Fondo Monetario Internacional, más del doble que en 2017.
A lo largo de 2024, apunta hoy Xinhua, el Ministerio de Finanzas ha asignado unos 1,2 billones de yuanes (169.604 millones de dólares, 155.250 millones de euros) al apoyo a la resolución de ‘deuda oculta’ por parte de los gobiernos locales.
El académico He Daxin, citado por ese medio, asegura que el plan de reducción de la deuda no solo tiene por objetivo reducir los riesgos sino también liberar a las administraciones locales para que vuelvan a incrementar su gasto público, expandiendo la inversión y promoviendo el consumo.
«Esto animará a los gobiernos locales a desempeñar un papel más activo en el desarrollo económico, y ayudará a mejorar todavía más el entorno local de negocios, aumentando la confianza en los mercados y produciendo un efecto amplificador», indicó He.
El plan, apunta el economista de Moody’s Analytics Harry Murphy Cruise, consistirá en la permuta de deudas extrapresupuestarias con altas tasas de interés por bonos del Tesoro a un plazo más largo y con un coste inferior.
Wang Tao, de UBS (SIX:), cree que este nuevo programa será mucho mayor al acometido en 2023 y 2024, y que será más comparable con el llevado a cabo entre 2015 y 2018, que sumó unos 12 billones de yuanes (1,7 billones de dólares, 1,6 billones de euros).
En opinión de Julian Evans-Pritchard, de Capital Economics, aunque «los esfuerzos para afrontar los riesgos de deuda de los gobiernos locales (…) son positivos para la estabilidad financiera a largo plazo, principalmente suponen transferir deuda de un bolsillo del Estado a otro, y por lo tanto tendrán un impacto relativamente escaso en la demanda a corto plazo».