La posible quiebra de Cineworld pone a la industria del cine en el punto de mira
22.08.2022 16:35
Imagen de archivo de personas pasando junto a una sala de Cineworld en Londres, Reino Unido. 4 octubre 2020. REUTERS/Henry Nicholls
Por Yadarisa Shabong
22 ago (Reuters) – Ahora que Cineworld, el segundo mayor operador de cines del mundo, está a punto de declararse en bancarrota en su lucha por recortar la deuda y recuperarse de la pandemia, la atención se centra en los retos a los que se enfrenta la industria para competir con la popularidad del streaming en casa.
El propietario de los cines Regal en Estados Unidos y operador de salas en otros nueve países dijo la semana pasada que la falta de éxitos de taquilla está alejando a los espectadores y afectando a sus flujos de caja.
Tras haber sobrevivido a la pandemia, la escasez a corto plazo de películas de gran presupuesto y la popularidad del streaming online amenazan la recuperación de Cineworld. AMC Entertainment (NYSE:AMC) Holding Inc también señaló un tercer trimestre difícil debido a una escasa programación de películas.
Cineworld, que tenía 8.900 millones de dólares de deuda neta a fines de 2021 y ya había dicho que estaba buscando formas de reestructurar potencialmente su balance, dijo el lunes que una opción es una declaración voluntaria de bancarrota bajo el Capítulo 11 en Estados Unidos.
«Cineworld espera mantener sus operaciones en el curso ordinario hasta y después de cualquier presentación», dijo la compañía que cotiza en Londres, opera más de 9.000 pantallas y emplea a unas 28.000 personas.
Sus acciones se desplomaron hasta un mínimo histórico el viernes, después de que The Wall Street Journal informó por primera vez de la posible operación.
El lunes, las acciones perdían más de un 18%, a 3,3 peniques, a las 1108 GMT. Eso se compara con un pico de más de 310 peniques en 2017. Los papeles de su rival AMC se desplomaban un 30% en las operaciones previas a la apertura del mercado.
«Los desafíos de Cineworld son una advertencia para todo el sector», dijo la analista de Hargreaves Lansdown Sophie Lund-Yates.
Aunque el problema específico de Cineworld es la cantidad de deuda que ha acumulado, el cambio más amplio en la forma en que el público de los cines quiere ver el último éxito es una tendencia que probablemente no se revertirá ni será más fácil para las cadenas de cines, añadió Lund-Yates.
La presentación del Capítulo 11 permite a una empresa seguir en activo y reestructurar su deuda.
«No obstante, como la empresa posee tan pocos activos tangibles, gran parte de su deuda será irrecuperable y sus accionistas serán eliminados», dijo Barry Norris, gestor de fondos de Argonaut Capital.
(Reporte adicional de Simon Jessop en Londres; editado en español por Carlos Serrano)