La premiada transformación de Pontevedra en favor de la peatonalización y la mejora de la seguridad
17.09.2022 02:25
La premiada transformación de Pontevedra en favor de la peatonalización y la mejora de la seguridad
El perímetro que rodea el centro de Pontevedra es el último lugar donde los coches pueden moverse con cierta libertad. En el ‘casco antiguo’ y las calles aledañas de la ciudad española, de algo más de 80 000 habitantes, el peatón tiene absoluta prioridad. En algo más de dos décadas, ha pasado de ser una urbe decadente, a un atractivo lugar en el que vivir. Elena se trasladó allí, desde Madrid, para evitar los largos trayectos al trabajo, y por comodidad.
«Aquí, lo tengo todo bastante cerca. Es decir, tengo el centro de salud, prácticamente, detrás de casa. El hospital también está cerca. Hay varios supermercados, prácticamente, debajo de casa. O sea que… no hay nada básico que esté lejos», declara Elena Herrero, ciudadana que procede de Madrid y reside en Pontevedra.
El modelo de ciudad también incide en el comercio, que aumentó un 7 %, en los años en los que se llevó a cabo la mayor parte de la reforma urbana. También surgen innovaciones. Esta tienda, además de vender material deportivo, sirve de lugar de encuentro para corredores y ciclistas.
«La gente sale a caminar y a pasear por la ciudad. Y, esto, es mucho más beneficioso para el comercio local, para poder realizar muchas más ventas, y tener mucha más repercusión», afirma Víctor Riobó, propietario de Miller Vintage Running Club.
El cambio se inició en 1999. Lo primero fue peatonalizar, por completo, el casco antiguo. Después, se siguió una estrategia clara, para que se percibiera la transformación como positiva.
«Cada ciudad tiene su calle principal, comercial, una arteria… esa es la que define el carácter. Si peatonalizas eso o le concedes un aspecto de preferencia peatonal, estás transmitiendo una imagen de que lo moderno, lo bueno, lo actual… es restringir la circulación de los coches», señala César Mosquera, concejal e impulsor de la peatonalización de Pontevedra.
El Ayuntamiento, además, creó Metrominuto, un plano como los del suburbano de las grandes ciudades, que marca los tiempos, caminando entre los diferentes puntos.
«Te ayuda y te anima a ir descubriendo, todo lo que es el ‘casco antiguo’ de una ciudad como Pontevedra, andando, paseando, y disfrutando de cada rincón», explica el turista Anxo Patiño.
El tráfico rodado está limitado a 10 Kilómetros por hora en el interior del centro urbano y solamente se permite el acceso, justificado, durante un breve espacio de tiempo.
«Gracias a la planificación de las autoridades, Pontevedra ha logrado un hito como ciudad: en más de una década no ha habido una sola muerte por atropello. Además, ha habido que afrontar otro reto: garantizar la seguridad, también, por la noche», indica el periodista de Euronews, Carlos Marlasca.
Algo que se logra mediante la iluminación, evitando los puntos oscuros, por un lado, y permitiendo la máxima visibilidad del peatón, en las zonas de interacción con los coches, por otro lado. Las luces, además, se adaptan al ritmo humano. Así, son más blancas en las primeras horas de oscuridad, cuando todavía hay actividad, y después, cambian de color.
«Al final, se transforma en una luz agradable, apacible, que además no contamina, desde el punto de vista lumínico, y acaba siendo una luz que nos invita al descanso, al sosiego, a la tranquilidad, y finalmente, al sueño», declara Ángel González, presidente ejecutivo de SETGA.
En 2014, la ONU consideró Pontevedra, como la ciudad más cómoda de Europa para vivir. El objetivo del Ayuntamiento, ahora, es seguir extendiendo la peatonalización.