Las reformas y la diversificación son clave para el crecimiento futuro del golfo Pérsico- FMI
31.10.2022 10:04
© Reuters. FOTO DE ARCHIVO: La refinería de petróleo y la terminal petrolera de Ras Tanura de Saudi Aramco, en Arabia Saudí, 21 de mayo de 2018. REUTERS/Ahmed Jadallah
DUBÁI, 31 oct (Reuters) – Se espera que los exportadores de del Golfo ahorren una media del 33% de sus ingresos petrolíferos en 2022-26, lo que conllevará una mejora de la balanza fiscal global, según declaró el lunes el Fondo Monetario Internacional, que subrayó la necesidad de resistir a la tentación de retornar a una política fiscal de gasto procíclico.
Se espera que el aumento de los precios del petróleo y el gas incremente el superávit medio por cuenta corriente en los seis países del Consejo de Cooperación del Golfo al 9,7% del PIB en 2022, frente al 4,6% del PIB del año pasado, lo que supondrá un superávit adicional de 275.000 millones de dólares, según dijo el FMI en su último informe.
«Muchos (Estados del golfo Pérsico) confirman que esta vez se ceñirán a sus planes (de disciplina fiscal)… Habrá que ver si esto se confirma con hechos. Siempre hay tentaciones de ser procíclicos», dijo a Reuters el director del departamento de Oriente Medio y Asia Central del FMI, Jihad Azour.
«Los exportadores de petróleo deben aumentar y reforzar sus reservas y utilizar este momento como prueba de fuego para una diversificación sostenible».
Se espera que los exportadores de petróleo de Oriente Medio superen a sus competidores, con un crecimiento proyectado del 5,2% este año, tras un crecimiento del 4,5% en 2021, impulsado por los altos precios del petróleo y el sólido crecimiento del PIB no petrolero, que contrarrestan el aumento de las tasas de interés mundiales y los altos precios de los alimentos.
Se prevé que el crecimiento se modere al 3,5% en 2023 a medida que los precios del petróleo bajen y la demanda mundial se ralentice, añadió el Fondo en su último informe.
Para el principal exportador, Arabia Saudí, el FMI prevé un crecimiento del 7,6% este año, ligeramente por debajo de la previsión del Gobierno del 8% y frente al 3,2% de 2021.
El crecimiento del sector petrolero del reino caéra según las previsiones al 3,3% el próximo año, desde el 13,1% en 2022, mientras que se prevé que el PIB no petrolero se sitúe en un 3,8% en 2023 frente al 4,2% de este año.
«Nuestras recomendaciones regulatorias para Arabia Saudí, así como para otros países exportadores de petróleo, son mantener la senda de las reformas que ayudan a diversificar la economía, mejorar la productividad (y) evitar las políticas monetarias procíclicas», dijo Azour.
El tamaño del sector no petrolero ha crecido en Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos y otros países del golfo Pérsico con la apertura de nuevos sectores que atraen inversiones, mientras que el sector financiero está «bien capitalizado, es rentable y fuerte», dijo Azour.
Posteriormente, en una conferencia de prensa celebrada el lunes, afirmó que el impacto de los bancos centrales del golfo Pérsico en el sector financiero era «relativamente limitado», al igual que las subidas de tipos de la Reserva Federal de Estados Unidos, a pesar de que la inflación en la región es más débil que la tendencia mundial. La mayoría de las monedas del golfo Pérsico están vinculadas al dólar estadounidense.
«Hasta ahora este impacto ha sido limitado y se ha compensado en gran medida por… la mejora de las reservas de divisas… así como por la mejora de la situación fiscal, que reducirá la necesidad de los Gobiernos de pedir préstamos y de desplazar al sector privado», dijo.
(Reporte de Rachna Uppal y Ghaida Ghantous; Editado en español por Flora Gómez)