Sedigas insta a copiar a Europa con rebajas fiscales al gas para consumidores
28.04.2022 17:26
Sedigas insta a copiar a Europa con rebajas fiscales al gas para consumidores
Madrid, 28 abr (.).- El presidente de la patronal gasista Sedigas, Joan Batalla, cree que España tendría que aprovechar la posibilidad que ofrece Bruselas de rebajar temporalmente el IVA del gas y el Impuesto Especial de Hidrocarburos (IEH) para «paliar» los efectos de la crisis energética entre los consumidores.
En una entrevista con Efe, Batalla ha pedido este jueves que se aligere dicha carga fiscal al igual que ha sucedido «con los consumos eléctricos y de agua, y con el Impuesto Especial sobre la Electricidad».
Además, ha mostrado su cautela respecto al acuerdo con la Comisión Europea para topar el precio del gas destinado a la generación eléctrica a la espera de que el Gobierno lo presente, previsiblemente, en el Consejo de Ministros del próximo martes.
La bajada temporal de los impuestos que gravan el consumo de gas es una de las líneas rojas que la asociación viene defendiendo desde los últimos meses, una iniciativa que también promueven algunos partidos políticos, como el PP, que en el último Pleno del Congreso reprochó a la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, su oposición a ponerla en práctica.
Durante la charla, el presidente de Sedigas ha recordado que la Comisión Europea establece «la posibilidad de rebajas temporales del IVA o, incluso, la reducción, dentro del marco de la directiva comunitaria, del IEH».
Teniendo en cuenta este aspecto, ve «oportuno» que España implemente «lo que están haciendo alguno de nuestros vecinos» como Italia, donde tienen un tipo reducido para consumo de gas del 5 %, de cara a proteger, en especial, a los colectivos más necesitados.
«No se entiende cómo tenemos un IVA reducido para el agua, un IVA reducido para la electricidad, y no tenemos uno para el gas», dice Batalla.
Considera así que el alivio de la presión fiscal, con un IVA que pase del 21 al 10 % y un IEH rebajado algo más de la mitad, a 0,00108 euros el kilovatio hora (kWh), sería un «elemento muy necesario a la hora de salvaguardar las necesidades de confort eléctrico, térmico, de los consumidores».
Sobre los potenciales beneficiarios de esta hipotética medida, dedica una mención a la consideración de «consumidor vulnerable», y repite: «No existe un consumidor vulnerable eléctrico, gasista o de agua, sino sólo vulnerable. Es el mismo».
Esto hace que la situación actual, marcada por las tensiones en los mercados producidas por la inflación y la invasión de Ucrania aún en un periodo de recuperación pospandémica, le afecte «a su bolsillo con independencia de si su consumo energético viene por un sitio o por otro».
TOPE AL GAS
Más prudente se ha mostrado a la hora de hablar acerca del «acuerdo político» alcanzado por España y Portugal con la Comisión Europea el pasado martes, para limitar el precio del gas destinado a la producción de electricidad durante doce meses, en los que no podrá superar de media los 50 euros el megavatio hora (MWh).
«Desconocemos los detalles, su implementación y cuáles son las características», dice Batalla, que recomienda que se considere que «no tenemos gas natural, se compra en los mercados globales, caracterizados por esa volatilidad, y se tenga en cuenta el coste real de generación».
«El ciclo combinado está comprando en esos mercados, y obviamente un precio intervenido tiene que reconocer el coste real», ha apuntado.
Ante la insistencia, reitera: «Hay muchísimas incertidumbres».
Una de ellas es cómo afecta este sistema a los flujos transfronterizos «porque si sólo hay una subasta con el precio del gas topado, lo que estoy haciendo es subvencionar por el consumidor español al francés o al resto de vecinos que no tienen un mercado de esta naturaleza como España y Portugal».
ESPAÑA, INFRAESTRUCTURA RESILIENTE
El presidente de Sedigas también se ha referido a la dependencia energética de la Unión Europea, donde en torno al 35 o el 40 % del gas que se consume procede de Rusia, un porcentaje que se eleva hasta el 85 % en las economías bálticas y los países del Este.
Batalla sostiene que el panorama actual «ha puesto de manifiesto la relevancia de algo que dábamos por descontado», la seguridad de suministro, un tema en el que España se encuentra a la vanguardia gracias a su infraestructura «resiliente», frente a potencias como Alemania, que si bien está acelerando varios proyectos, a día de hoy, «no tiene ninguna planta de regasificación».