Expectativas, retos y desafíos: ¿qué pasará con la reapertura de la frontera entre Colombia y Venezuela?
29.07.2022 23:47
Las expectativas sobre la prometida reapertura de la frontera entre Colombia y Venezuela crecen mientras más se acerca la fecha para que Gustavo Petro asuma funciones en la Casa de Nariño, el próximo 7 de agosto.
Ciudadanos y comerciantes de ambos lados de la frontera, que se extiende por más de 2.200 kilómetros, perfilan proyectos, trazan objetivos y procuran superar los retos para reconstruir la tensa relación bilateral que ha sido golpeada durante años.
Pero el desarrollo formal de las actividades en una frontera viva de gran intercambio social, cultural y con profundos lazos familiares, también tiene el desafío de batallar contra mafias y grupos criminales que imponen prácticas ilegales.
3/3 Manifestamos la necesidad de establecer una agenda de trabajo para revisar temas de interés binacional y garantizar la paz en nuestras fronteras. Además, coincidimos en que el diálogo es el camino correcto para el entendimiento mutuo. pic.twitter.com/qSqTYiNfnr
— Carlos Faria (@Fariacrt) July 28, 2022
Bajo este escenario, actores de ambos países han manifestado su disposición de iniciar una nueva etapa de relaciones, que permita reconstruir la confianza mutua y evaluar la posible creación de una Zona Económica Especial.
Un acuerdo por la frontera
A mediados de junio, Petro y el presidente venezolano, Nicolás Maduro, se comunicaron vía telefónica y expresaron su disposición de restablecer las relaciones. Ese primer acercamiento motivó a que los comerciantes y gremios empresariales de Colombia y Venezuela decidieran realizar a inicios de julio un evento en el que trazaron objetivos para el reinicio de la actividad económica.
La cita se efectuó en San Cristóbal, capital del estado venezolano del Táchira y fronterizo con Colombia, y participaron representantes de Petro y del gobierno de Venezuela.
El encuentro fue positivo y culminó con la firma del llamado «Acuerdo por la frontera», un documento que dejó seis líneas de acción:
- Recomponer las cadenas de valor binacional.
- Recalcar la importancia de mantener acuerdos independientemente de las ideologías y perspectivas personales.
- Generar canales eficientes de comunicación.
- Insistir en la necesidad de la complementariedad y lazos estables de cara al futuro.
- Respetar la comunicación para garantizar la seguridad jurídica y la seguridad personal.
- Promover un círculo virtuoso para ambas naciones basado en la reciprocidad, solidaridad y legalidad.
Realizado con éxito el Acuerdo de la Fronterahttps://t.co/nOXd55Wfytpic.twitter.com/8d7F72D6Wx
— Fedecámaras Táchira (@FedecamarasT) July 24, 2022
En el evento, los actores se comprometieron a trabajar por la paz, el respeto mutuo, la legalidad y en favor del comercio formal. Además, indicaron que el 8 de agosto sería la fecha probable para la reapertura fronteriza.
¿Qué dicen los empresarios?
La presidenta de la Cámara de Comercio del estado Táchira, Isabel Castillo, dijo en una entrevista con Fedecámaras Radio que la entidad está preparada para reactivar las actividades, ya que los empresarios solo esperan que se abra el paso para comenzar a desarrollar sus proyectos.
«Si nos dicen que mañana van a abrir la frontera, ya estamos listos para empezar a hacer las actividades normales de cualquier exportación e importación», dijo Castillo, quien recordó que los planes binacionales se remontan a diciembre de 2021, cuando se intentó hacer un intercambio comercial fronterizo que no fue fructífero por la falta de receptividad en el gobierno de Colombia.
Ahora el gremio confía en que la toma de posesión de Petro dé el banderazo para que se abra frontera e inicie, «de manera gradual», el proceso de intercambio comercial con «algunas actividades» del sector aduanero, para luego dar paso al transporte de mercancías y de pasajeros.
Reconstruir la confianza
Por su parte, el presidente ejecutivo de la Cámara Colombo Venezolana, Germán Umaña, señaló en una entrevista con la Fundación Paz y Reconciliación de Colombia (Pares), que el tema central en la frontera es reconstruir la confianza y la «sólida relación» que tuvieron ambos países hasta hace poco más de una década.
Lo más urgente, dijo Umaña, es el acercamiento institucional con seguridad jurídica, que permita recuperar «los indicadores sociales», en vista de que el cierre de la frontera provocó desempleo, pérdidas de ingresos per cápita y aumento de la pobreza.
Para resolver la situación, Umaña propuso dar «la ciudadanía binacional» a los habitantes de frontera, con miras a que se potencie el desarrollo sostenible de la zona mediante facilidades para la población que se mueve entre ambos países.