Instituto Ifo revisa a la baja y pronostica un estancamiento de economía alemana en 2024 Por EFE
05.09.2024 14:56
Berlín, 5 sep (.).- El instituto económico alemán Ifo corrigió a la baja sus previsiones para el año en curso y pronostica ahora un estancamiento de la economía alemana, cuando en su anterior informe todavía hablaba de un crecimiento del 0,4 %.
El Ifo también rebajó su estimación para el próximo año con un crecimiento del 0,9 %, en lugar del 1,5 %, que ya sólo se espera para 2026, según las previsiones publicadas este jueves.
Según Timo Wollmershäuser, jefe de estudios económicos del Ifo, «la economía alemana está estancada y no avanza en esta desaceleración, mientras que otros países experimentan un repunte».
«Tenemos una crisis estructural. Hay muy poca inversión, sobre todo en la industria, y la productividad lleva años estancada. Además tenemos una crisis coyuntural. La situación de los pedidos es mala y el aumento del poder adquisitivo no se traduce en un mayor consumo, sino en un mayor ahorro, porque la gente se siente insegura», añadió.
La tasa de ahorro es actualmente del 11,3 %, significativamente por encima de la media del 10,1% de los últimos diez años antes de la pandemia del coronavirus, apunta el Ifo.
Al menos la tasa de inflación representa un rayo de esperanza y seguirá bajando del 5,9 % de 2023 al 2,2 % pronosticado para este año, al 2 % en 2025 y al 1,9 % en los dos años sucesivos.
En tanto, la tasa de desempleo aumentará del 5,7 % del año pasado al 6 % en este, para bajar en 2025 al 5,8 % y situarse después en el 5,3 %.
El Ifo prevé que el déficit presupuestario alcance el 2 % del PIB en 2024 y descienda al 1,3 % y al 0,9 %, en los dos próximos años, respectivamente.
El sector de la construcción, en el que se prevé una contracción del 3,1 %, y la industria, que disminuirá un 2 %, tendrán un impacto negativo este año, agrega el comunicado.
«La descarbonización, la digitalización, el cambio demográfico, la pandemia de coronavirus, la crisis de los precios de la energía y el papel cambiante de China en la economía mundial están poniendo bajo presión los modelos de negocio establecidos y obligando a las empresas a adaptar sus estructuras de producción», señaló Wollmershäuser.
Como consecuencia se registra una caída de la inversión, sobre todo en la industria, que en Alemania representa una proporción mucho mayor del PIB que en otros lugares.
«Y la población envejece más deprisa, con cada vez menos personas trabajando. El desplazamiento del sector industrial al de servicios explica en gran medida el estancamiento de la productividad de los últimos años», agregó.
